Vamos directamente al asunto ahorrándonos la retórica. A continuación,
expondré, para su consideración y análisis, varias maneras de cómo lograr la
descolonización de Puerto Rico. Haga un esfuerzo por sí mismo y trate de lograr
llegar a su propia conclusión sin la injerencia de los supuestos “lideres” que
ordenan como se debe pensar, obrar y votar. Trate de lograr la independencia de
juicio si quiere lograr la independencia de esta nación.
Existen varias maneras de cómo lograr la descolonización de
un país, menciono algunas en este escrito. Pero la gran mayoría solo conoce de
dos; elecciones y la lucha armada.
En una nación contaminada por el bipartidismo como el
nuestro y bajo la influencia del sistema colonial, no se logrará por medio de
las elecciones.
Quien crea que el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) habrá de ganar unas elecciones, que se
deje de beber agua del inodoro que le está distorsionando su razonamiento.
Descarte la lucha armada, por obvias razones.
Si quiere irse al monte a luchar, mejor váyase de camping al
bosque de Maricao, allí luchará contra los insectos y los mosquitos, es lo
único que encontrara. Usualmente quienes hablan de lucha armada, los únicos
tiros que han hecho ha sido cuando han comido pana de pepita. Descartando las
dos conocidas, vamos con las demás, con sus pro y contras. No estarán en orden
de preferencia o posibilidades.
“A la boicot económico”. En ocasiones se hace mención a la
India cuando se refieren al boicot. Es cierto, eso contribuyo a la independencia
de ese país, pero no fue lo único. En nuestro caso de Puerto Rico, somos un
país consumista, la gente preferirá cortarse su órgano sexual antes de dejar de
comprar en una megatienda.
“A la Gandhi” (paz y amor). Lo siento por los supuestos
pacifistas y por aquellos que les conviene que seamos "a la buena de
Dios”. Ciertamente tuvo su rol, pero igual que el boicot, no fue lo que logró
la independencia por si sola. Cuando no funcionaba “A la Gandhi”, se recurría a
“a los tiros” y se tiraron tiros a más no poder. Entiéndase que en ese caso y
muchos más, se ensayaron muchas formas y maneras para lograr la independencia.
“A la Solidarnos”. El caso de Polonia, donde se logró la
independencia de Rusia con un movimiento de oposición al gobierno encabezado
por el sindicato obrero Solidarnos. Para nada eso ocurrirá en Puerto Rico, la
mayoría de los líderes obreros y su matrícula, tienen otros intereses.
“A la ONU”. Ni pensar que la Organización de las Naciones
Unidas (ONU) haga una intervención directa en nuestro caso.
“A la Resoluciones de la ONU”. Ni caso se le ha hecho a ninguna
de las 35 resoluciones por parte del Congreso gringo. En el 1990 dije que
llegaríamos al 2000, incluso hasta el 2050, pidiendo resoluciones y el congreso
gringo se las pasarían por donde no le da el sol.
“A la Gringo”. No crean que los mismos gringos nos concederán
la independencia. Si lo hicieran, buscaran que sea una neocolonial,
administrada por los mismos sospechosos usuales, porque es la colonia lo que a
ellos les conviene para seguir explotándonos.
“A la Libre Asociación”. Para lograr una libre asociación,
primero se tiene que ser libre. Si caemos en ese juego durante la colonia,
colonia seguiremos pero con otro nombre, como el Estado Libre Asociado (ELA) Soberano.
“A lo Plebiscito”. Otra pérdida de tiempo, el Congreso
gringo jamás se vinculará ni pronunciará a validar los resultados de un
plebiscito. Por la misma razón que la anterior: lo que más le conviene a los
Gringolandia es la colonia. El congreso cantará, otra vez, aquella canción de
Shakira titulada; “ciega, sordomuda”.
“A la Asamblea de Status”. Preferiría que fuera una asamblea
constituyente pero eso será luego de lograr la independencia. Para lograr tal
asamblea, se requerirá una serie de pasos, el primero sería consultar al pueblo
si quiere o no tal asamblea. Pero tanto el PPD como el PNP, no quieren eso. Con
solo perder la primera votación donde se consulta al pueblo si quiere o no la
asamblea, hasta ahí llegamos. Y si aún
se lograra la aprobación, todavía estaríamos sujeto a lo que el Congreso
decida.
“A las Marchas y Protestas”. Al congreso eso no le afecta,
ellos están en Washington. En ocasiones veo estas acciones como un grupo de
ovejas pasando frente a los lobos. Para los administradores de la colonia es
solo una inconveniencia pasajera. En la mayoría de las ocasiones, no se le hace
mucho caso. Entiéndase que no estoy diciendo que no se hagan, pero que no se
espere un cambio de status por medio de estas.
“A la Cantando”. Créanlo o no, cantando se logró la
independencia de Estonia, Latvia y Lituania. Si no me creen busquen en la Internet
información sobre “The Singing Revolution”, incluso hay una película. Canciones
de contenido patriótico lograron que el amor patriótico hiciera posible la
descolonización. Aquí lo que se hizo fue eliminar el cantar en las escuelas,
tal vez temían que eso se pudiera repetir acá.
“A la Abstención Electoral”. Aun no se ha ensayado ese
método aquí, solo ha habido unos cuantos que han entendido que nada habrá de
cambiar con votar. Votar es nuestro pasatiempo favorito y la forma de hacer
catarsis ante las administraciones coloniales. El votar esta en nuestro ADN,
como buenos colonizados. Por medio de las elecciones coloniales, el sistema no
habrá de cambiar, solo cambia el color de la administración.
Pregúntese, ¿qué pasaría si una inmensa mayoría no votara?
Eso le quitaría la legitimidad, condonación, justificación y apoyo al sistema
colonial, porque eso es lo que se hace al votar en las elecciones coloniales.
Entonces las elecciones serian nulas y tendrían que tratar el problema de raíz.
Pero al sistema no le conviene eso, por eso se gasta tanto dinero para que
usted vaya a votar y usted se convierta en cómplice. Justifíquese todo lo que
quiera para seguir votando, pero al votar, usted es parte del problema y no a la
solución.
“A la Peregrinación de los Colonizados”. Periódicamente los
partidos se dan el viaje a Washington a presentarse ante el Congreso gringo. El
Partido Popular Democrático (PPD) para rogar que se le dé más poderes para la
culminación del mal llamado ELA. Los PNP para rogar para que se les conceda la
estadidad. Y el PIP para rogar
para que nos otorguen la libertad e independencia. Si no fueran colonizados no
le estarían rogando al imperio. ¡Cómo nos hemos acostumbrado a esa tradición y
a que nada haga el Congreso gringo! ¡Y seguimos con ese ritual!
“A la Estado Nacional Soberano de Borikén (ENSB)”. Ramon
Emeterio Betances pronuncio dos verdades: “Ser libre es empezar a serlo” y “El
pueblo que quiere libertades las coge y no las espera de nadie de gracia y
merced”.
Basándose en esas dos citas, se ha constituido el ENSB, se
ha declarado la independencia, la libertad, la verdadera y única soberanía y se
estableció un gobierno provisional. Es una lástima que el protagonismo,
ignorancia, egotismo, etc., no permita considerar este proyecto.
Cuando una persona desarrolla más fidelidad al grupo,
movimiento o partido vs el bienestar de la nación, ni se da cuenta de su acción
perjudicial. Tal vez esas fueron las razones para no haber participado, cuando
se convocó, en la creación del ENSB y las mismas para no considerar el proyecto.
Pero no se necesita rogarle a nadie como tampoco el aval o permiso para
constituirse y presentar otra manera de cómo lograr el propósito de
descolonizar nuestra nación. Sugiero que si usted ya está harto y cansado de lo
mismo, no ha caído en la locura de hacer lo mismo esperando resultados
diferentes, considere lo que propone el ENSB.
Como se habrá dado cuenta, para nada hablo de la estadidad
como solución descolonizadora, porque la estadidad es sino lo contrario, es la
culminación de la colonia. Es la disolución de una nación y con ello su
cultura, tradiciones, idioma, etc.. y yo no tengo interés en suicidio nacional.
Lo que no podemos perder de vista es que no podemos poner
todos los huevos en la misma canasta, entiéndase que no podemos esperar que una
formula o manera sea la única, hay que ensayar todas y otras. Les invito a
pensar fuera del cuadro y a considerar la viabilidad de cada una de estas
maneras de lograr descolonizar nuestra nación.
La fidelidad es para con la descolonización de nuestra
patria, no para una organización, partido, grupo o movimiento. Cada cual por su
lado no llegaremos a nada. Unidos sí.
Como bien se dice; separados nos vencen, unidos vencemos. Logremos
la descolonización e independencia primero y después que el pueblo decida cómo
será el sistema político de gobierno que sea el más apropiado para nuestro
futuro.