21 de febrero de 2019
Comunicado: San Juan, Puerto Rico- No a una
intervención militar contra Venezuela
Sonia Santiago Hernández, portavoz 787-619-5175
Las Madres contra la Guerra nos unimos al llamado que
hacen organizaciones homólogas, como Veterans for Peace, exigiendo que no se
intervenga militarmente contra el pueblo venezolano. Cabe destacar que
actualmente Estados Unidos (EEUU) le ha impuesto a Venezuela muchas sanciones
que incluyen el congelamiento de más de $20 mil millones de dólares; un bloqueo
inmisericorde que incluye el suministro de medicamentos y se niega a participar
en acciones de asistencia humanitaria concertadas por la Organización de
Naciones Unidas.
António Guterres, máximo representante de la ONU, ha
sostenido desde enero de 2019 que se debe tratar de promover el diálogo para
reducir tensiones para la distribución de alimentos y ayuda humanitaria. La ONU
muy acertadamente insta a que el apoyo a Venezuela debe ser al márgen de
propósitos militares o políticos. Es necesario que el pueblo puertorriqueño sepa que
actualemente en Venezuela , la ONU con la representación de sus países
miembros, está trabajando arduamente en mejorar las condiciones de vida, salud,
alimentación y bienestar del pueblo venezolano.
Cuando hay una crisis, una catástrofe en cualquier
país, se activan los protocolos de asistencia humanitaria y se coordina con sus
respectivos gobiernos. En vez de ello, nos preocupa el discurso belicista y
amenazante del presidente de EEUU, Donald Trump, quien ha activado una
presencia militar cerca de Colombia y Venezuela en los pasados días.
Venezuela es un país rico en petróleo, productos
agrícolas y minerales. Dada nuestra nefasta experiencia por la usurpación del
petróleo iraquí y del gas natural de Afganistán ( que ya están controlados por
los magnates petroleros y energ;eticos de Wall Street), y el horror que esas y
otras guerras han significado para sus habitantes y para los militares, vemos
clarísimamente que se está gestando una guerra contra Venezuela.
En la misión de Madres contra la Guerra decimos: “Como
Madres, creamos vida, Nosotras cultivamos la Vida.La guerra es la antítesis de
la maternidad. Nosotras abrazamos la vida y trabajamos para asegurar un
ambiente de paz. Le hacemos un llamado a los líderes de EEUU y del mundo para
que actúen como guardianes del mundo que nuestros hijos e hijas van a heredar”.
Reiteramos ese llamado en el caso de Venezuela pueblo hermano.
A los militares boricuas les hacemos un llamado a que
se acojan a la objeción por conciencia, que está contemplado en su reglamento
militar y que no sean cómplices de un genocidio. Siempre usan a los militares
para adelantar los intereses capitalistas de Wall Street.
Porque la maternidad es vida y la guerra es muerte,
luchamos por la paz.