Un grupo de gente se congregó el domingo, 27 de
noviembre de 2016 en el cementerio municipal de Aguada para conmemorar el
natalicio del león de Aguada con nombre de Cordero Andrés Figueroa
Cordero. Oprima el siguiente enlace para ver lo que ocurrió allí:
https://youtu.be/_zwCWcVFmAg
Estuvo presente el único que queda vivo de los 4
nacionalistas que atacaron al congreso de Estados Unidos el 1 de marzo de
1954 para llamar a atención del mundo que aun con el cambio de nombre a Estados
Libre Asociado de Puerto Rico, Borikén continúa siendo una colonia
estadounidense.
Rafael Cancel Miranda narro allí
anécdotas sobre lo valiente que era su compañero de lucha y jibarito del Barrio
Laguna de Aguada. Por eso fue que decidí
en el título que tiene este artículo.
En el Barrio Laguna donde nació, se desveló un
busto de Andresito. Un comité de
residentes se ha encargado de celebrar por los últimos 15 años el natalicio de
nuestro querido héroe. Oprima el siguiente
enlace para ver un video sobre esa actividad: https://www.youtube.com/watch?v=jSp3l-xMir0
Me impresiona mucho el hecho de que una multitud de
puertorriqueños se moviliza anualmente a las tiendas estadounidenses en Puerto
Rico en el famoso viernes negro, pero no lo hace para rendir honor a
nuestro héroe nacional. Los
puertorriqueños hemos sido indoctrinados durante casi 120 años para que nos
comportemos de tal manera que siempre se beneficie el gobierno de Estados
Unidos.
A través de la difusión correcta de nuestra verdadera
historia, esperaríamos que empecemos a descolonizar nuestras mentes para
respaldar lo nuestro y boicotear lo que se nos ha impuesto con la invasión
militar del 1898. Eso nos permitiría
crear la solidaridad necesaria para organizarnos para lograr nuestra liberación
Nacional.
EL PERFIL DE ANDRES FIGUEROA CORDERO
ResponderEliminarTuve el privilegio inmenso de conocer personalmente a Andrés Figueroa Cordero desde 1975. Nuestro primer encuentro fue en el Hospital Prisión de Estados Unidos ubicado en Springfield, Missouri. Allí estuve cuatro veces. En la primera ocasión que intente visitarlo los encargados de la prisión no me permitieron verlo.
En la segunda ocasión que llegué a la prisión pude reunirme con Andrés bajo la vigilancia de un oficial de custodia. En ese primer encuentro nos abrazamos y lloramos de emoción. Él estaba convaleciendo de una operación de un tumor canceroso en un pulmón. Era la tercera operación que le habían practicado para extirpar tumores cancerosos. En la primera operación le extirparon parte del colon y le realizaron una colostomía. La segunda operación fue para contener la metástasis al pulmón derecho.
Aunque estaba débil y extremadamente delgado, Andrés se expresaba alegre y sonriente, no se quejaba de nada. Me dijo que el Alcaide de la prisión le ofreció liberarlo si firmaba un documento en el cual pedía perdón. Andrés le contesto que no le trajera más ese papel porque no lo iba a firmar. La fortaleza espiritual que emanaba de aquel torturado ser humano me conmovió.
Me agradeció varias veces nuestro esfuerzo por su excarcelación y la de los demás compañeros nacionalistas. Aquella tarde, cuando me despedí de Andrés sentí la angustia de dejar allí, enfermo y encarcelado a un ser humano ejemplar. Dos años más tarde cuando logramos su excarcelación, recordé lo solo que lo deje y solo que quede yo.
Saludos Nelson,
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir eso recuerdos de Andresito.
Yo nunca lo conocí, pero sé que me hubiese sentido muy honrado de haber compartido con un ser humano con tanto amor por su patria.
¡Un abrazo, hermano!
José